Manifiesto de In-evolución

La decepción es un camino sin retorno (por suerte).

Prefiero el dolor de la desilusión que la infertilidad del cinismo.

Evitaré amputar la intensidad y difuminar los matices.

Tampoco estoy dispuesta a participar en la fascinación complaciente por lo mediocre.

María, marzo de 2021.